Más sabe el diablo por
viejo que por diablo.
Así fue como le sucedió
al viejo continente. Terminada la
II Guerra Mundial y ante la escasez de alimentos y de poca
calidad de que disponían los ciudadanos europeos, algunos países líderes en políticas
sociales, democracia, y libertad e igualdad de las personas, pusieron en marcha
una Política Agraria Común (PAC) con el fin de tener asegurados esos alimentos
tan necesarios que estabilizarían y pacificarían a sus ciudadanos.
Pasados 40 años y estando
a finales del S.XX se decidió realizar una gran ampliación de la UE hasta el modelo actual formado
por 28 países. Los temores a guerras, dictaduras, crisis políticas y económicas
se creían superados, afortunadamente.
Ya en pleno S.XXI estos
28 países han vuelto a aprobar una PAC con un reparto de dinero público
totalmente necesario y justificable para el sector agroganadero directamente y
con repercusión indirecta y positiva para consumidores, empresarios del sector,
trabajadores directos e indirectos del agro. También necesario para la
supervivencia de nuestros pueblos y del mundo rural, con sus riquezas naturales
incluidas (caza, pesca, ríos, bosques etc.)
Pero los jóvenes
dirigentes del viejo continente han olvidado por completo el mandato de la PAC, que en sus primeros pasos
no fue otro que asegurar alimentos en cantidad y calidad para sus ciudadanos. Estamos
en años muy difíciles, en los que al parecer algunos gobernantes no temen la
falta de alimentos.
Hoy todo se compra, todo
se vende, don dinero lo puede todo, pero el dinero es un bien escaso. Escaso
como lo son los alimentos para los mas de 900 millones de persona que están
pasando hambre en el tercer mundo. Y alguno de ellos en el primer mundo. “DONDE ESTA LA FAO”.
La PAC, aprobada recientemente y que se nutre de dinero público, no
obliga a agricultores y ganaderos a producir materias primas para los alimentos
(pagos desacoplados) y únicamente nos relega a los profesionales del sector a
un papel secundario y marginal, arrinconándonos como si fuésemos la peste, fomentando
también el abandono de nuestros pueblos, el deterioro del mundo rural,
desequilibrando la vertebración de los territorios y perdiendo un legado
milenario en cultura, historia y patrimonio.
En todo este ir y venir
de intereses, los gobiernos de los estados miembros ratifican la PAC aprobada en Bruselas. De
esta manera vemos impotentes los acuerdos bilaterales con terceros países (Norte
de África, y Sudamérica), acuerdos en los que utilizan la agricultura y ganadería
como moneda de cambio, dejando nuestras frutas, hortalizas, carnes, leche, cereales,
etc. sin valor alguno y con muchas dificultades para subsistir nuestras
explotaciones ante la nueva PAC, que en ningún momento compensa estas pérdidas.
Productos que llegan a
Europa sin las exigencias sanitarias, de bienestar animal y de producción que
aquí estamos obligados a cumplir. Productos agrícolas y ganaderos conseguidos
con salarios ínfimos, en ocasiones con mano de obra infantil. “DONDE ESTA LA ONU”.
Esperemos que se recupere
el sentido común y vuelvan a florecer los valores fundacionales de la PAC y esperemos que los
dirigentes reflexionen, piensen con criterios objetivos, coloquen a cada oveja
en su redil, reorganicen la situación para no vernos muy pronto en tiempos
pasados de guerras y miserias que nacen del hambre y simplemente el hambre nace
cuando no hay alimentos y esta política es lo que está haciendo, privarnos de
nuestro derecho a alimentarnos dignamente y de trabajar y generar riqueza para todos los
ciudadanos.
Creo no exagerar al decir
que estamos siendo testigos pasivos del mayor genocidio jamás conocido. Un
genocidio que ningún tribunal juzgará, pero si lo juzgará la historia, y no debemos
ser nosotros los agricultores y ganaderos los que lo contemplemos impasibles.
Tenemos que seguir
luchando por nuestros derechos al trabajo, a tener unas rentas dignas que
permitan vivir a nuestra familias y podamos seguir siendo esos fabricantes de
alimentos para el resto del mundo y mantenedores de nuestra historia y raíces
en nuestros pueblos.
Enrique Arceiz Casaus
Secretario de Organización
de UPA Aragón
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.